Mirtha es muy buena en lo suyo
En el último "Almorzando con Mirtha Legrand", el invitado fue uno solo: Marcelo Tinelli. De ese encuentro se han comentado muchas cosas. Yo solo quiero aprovecharlo para destacar a Mirtha Legrand como comunicadora e insuperable en lo que hace. Se la critica por la edad, por el formato del programa (por pasado de moda), porque interrumpe, porque dice lo que piensa y en esos momentos vierte conceptos muy polémicos, por la cantidad de alhajas que usa... Y a pesar de todo eso sigue vigente, cuando desaparece de la pantalla los canales se pelean por tenerla en su grilla, y mucha gente considera que "llegó" recién después de pasar por su programa. Quizás en esto último la cosa se ha desvirtuado un poco, hoy en día al programa de Mirtha -sea "La Noche..." o "Almorzando..."- van todos, no hay filtros de ningún tipo. Salvo los que se niegan o se enojan con la conductora, o quizás algún "censurado" por ella, que no está mal, es su programa y puede invitar -o no- a quién quiera. Pero ya no es un programa de invitados de cierta categoría, eso es cierto, se masificó y a veces eso no es tan bueno. Opinión personal. ¿La edad? Está espléndida para su edad, tanto física como mentalmente. Lúcida, preparada, rápida de reflejos, bien informada, estudia a cada invitado... si alguna vez dice algo que no nos gusta es lógico, nos pasa con todos los seres humanos. Coincidir cien por ciento sería un milagro, con Mirtha o con cualquiera. ¿Formato perimido? No lo creo, como tampoco me parece obsceno que la gente coma en televisión. Todos comemos y, si bien es cierto que hay gente que pasa hambre, el programa no se regodea en lo que come, apenas lo describe al comienzo porque detrás del menú está el trabajo de varias personas que viven de eso, de cocinar. En lugar de la "económica" charla de sillón a la que apelan muchos programas de TV, en éste se come, no creo que esté mal. Podrán decir que la TV es imagen y el programa no explota eso, pero en este caso creo que prima ver a la gente cuando habla, cómo dialoga con el resto y cómo expresa lo que piensa. ¿El look? Está acorde a su edad y a cómo ella se siente cómoda. Le gusta llenarse de anillos, pues bien, es su personalidad y está bien que lo haga en TV. Es una diva, una estrella y, como tal, se le exige un look distinto al resto. En lo que a mi respecta, se viste, peina y maquilla de acuerdo a su edad, lo cual celebro, sobre todo mirando otros ejemplos que hacen lo opuesto. Y si interrumpe, qué decir, es su sello. Nadie es perfecto. Ella lo sabe y ha tratado de corregirse, pero no siempre puede. En el caso de un programa con un único invitado, como el de Tinelli, le sirve al invitado para comer algo en ese momento. Por suerte, también en el caso de Tinelli, el animador se empeñó siempre en terminar el cuento que venía haciendo cuando era interrumpido. No siempre pasa y eso hace que nos enojemos con Mirtha, pero tampoco es tan grave, sí un poco molesto. En definitiva, poniendo todo en la balanza, Mirtha Legrand sale ganando con holgura y confirma su vigencia dentro de lo que hace. El rating le da la razón y los invitados que convoca, de todos los colores e ideas, también avalan su importancia. Después, si el programa gusta o no es otra cosa, pero nadie puede decir que está mal hecho. De mi parte, defiendo a Mirtha y admiro lo que realiza. Muchos quisieran tener su trayectoria y seguir haciendo lo que hace a su edad sin perder calidad y convocatoria.
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