Me intriga el final

No sigo "Malparida" todos los días, veo parte de sus capítulos y en días salteados. Pero sé de qué va, lo que está pasando y compruebo cada vez que la veo que todas las atrocidades que comete la protagonista se están concretando una a una. Mi gran incógnita es cómo van a terminar los autores esta telenovela. Porque las escenas de Renata (Juana Viale) con Lautaro (Gonzalo Heredia) son las de mayor carga romántica de la historia, las que van acompañadas del tema musical romántico de la novela y en las que la maldad desaparece por un rato. Es como estar en una nube por unos minutos. Pero cuando se vuelve a la realidad y se piensa un poco, sería inaceptable -al menos para mí- que esa mujer que no para de asesinar (y nada menos que a la madre, la esposa y tiene en la mira al padre del protagonista) salga indemne. No me entra en la cabeza que el final sea un "happy end" con Renata y Lautaro juntos y comiendo perdices. Pero cuando veo algunas disculpas o atenuantes que los autores, como disimuladamente, van introduciendo en el comportamiento de Renata, como queriendo justificar tanta maldad, me empiezo a asustar. Porque, si uno de los programas de mayor rating en el horario central, va a terminar con su malvada protagonista triunfante, sea en el aspecto que sea (su venganza o el amor), estamos perdidos. Ya son muchos televidentes, autoridades y opinólogos los que tienen mucho que decir y criticarle a Tinelli, pero no veo que ninguno de ellos se alce contra una historia en la que la de los valores desvirtuados está en primer plano y encima es el gran amor del bueno del galán. Sólo espero que el final ponga las cosas en su lugar porque, para mí, el mensaje de "Malparida" es tan criticable y censurable como mucho (o más) de lo que diariamente se ve en "ShowMatch". Es más, creo que en el programa de Marcelo Tinelli está todo a la vista, mientras que en "Malparida" el mensaje es menos directo y, por eso, más perjudicial.