Al Carnaval lo visito de a ratos. Dentro de eso entran los programas de TV que tienen que ver con la fiesta popular, llámese las trasmisiones de los distintos desfiles, las actuaciones en el Teatro de Verano o los programas alusivos. Pero cada vez que los veo, sea unos minutos o un rato más largo, debo reconocer y felicitar que los comunicadores que trabajan en ellos están preparados para hacerlo. No son unos improvisados que están allí por otras razones -estéticas, de suerte, de amiguismo, de hacerlo solo porque es trabajo-, que se dan en muchos casos en la TV. Son personas que no solo llevan el Carnaval en la sangre, sino que -salvo contadas excepciones- también salen muy bien en cámara y se preparan para lo que van a hacer. Sea presentar una agrupación, hablar sobre las reglas de lo que estamos viendo (el desfile de scolas do samba, por ejemplo) o entrevistar a sus figuras. Saben de lo que hablan y con quien hablan. Y eso, para los que estamos un poco alejados del tema, es de mucha utilidad, nos hace quedarnos mirando porque nos informamos y aprendemos.Además, las propuestas no se han quedado en el tiempo y en que cuentan muchas veces con un público cautivo. Para nada, todos los años buscan renovarse, incluir aspectos distintos, e implementar cosas creativas en materia de imágenes, muy importantes en el Carnaval. Se encuentra lo que hay que encontrar y también el plus. En una TV uruguaya tan poco creativa y renovada, que haya personas que sigan apostando a superarse cada año sin dormirse en que hay un espectador que siempre los va a ver, es para aplaudir y destacar.
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